Maestro y Sociedad e-ISSN 1815-4867

Volumen 22 Número 4 Año 2025

Artículo original

Metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media

Active methodologies in the learning of Language and Literature in Basic Middle Education

Metodologias ativas no ensino de Língua e Literatura na Educação Básica e Fundamental

María Fernanda Pazmiño Moreira *, https://orcid.org/0009-0006-3525-1389

Eddy Favián Solórzano Solórzano, https://orcid.org/0009-0002-5904-0544

Universidad Laica “Eloy Alfaro De Manabí”, Ecuador

*Autor para correspondencia. email maria.pazmino@pg.uleam.edu.ec

Para citar este artículo: Pazmiño Moreira, M. F. y Solórzano Solórzano, E. F. (2025). Metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media. Maestro y Sociedad, 22(4), 3194-3205. https://maestroysociedad.uo.edu.cu

RESUMEN

Introducción: Esta investigación analiza la implementación de metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en estudiantes de sexto año de Educación Básica Media de la Unidad Educativa Pichincha (Manabí, Ecuador), donde persisten métodos tradicionales debido a limitada formación docente, escaso apoyo institucional y carencia de recursos tecnológicos. Materiales y métodos: El estudio empleó un enfoque mixto con diseño no experimental descriptivo y correlacional, aplicando encuestas a 68 estudiantes, observación de clases y entrevista a un docente, mediante muestreo por conveniencia estratificado. Resultados: Los resultados revelaron que el 67% de los estudiantes percibe escasa o nula implementación de metodologías activas, aunque el 51% prefiere actividades prácticas sobre clases expositivas. La observación confirmó predominio de métodos tradicionales, con ausencia total de estrategias lúdicas y uso limitado de recursos digitales (25% de las clases). Discusión: La discusión evidenció una brecha entre la predisposición estudiantil hacia enfoques activos y las prácticas docentes actuales, destacando como barreras la formación insuficiente, carga curricular y evaluación tradicional. Conclusiones: Es imperativa una transformación paradigmática hacia metodologías centradas en el estudiante, con formación docente continua, dotación de recursos y alineación institucional para desarrollar competencias críticas y creativas acordes a las demandas del siglo XXI.

Palabras clave: Metodologías activas, lengua y literatura, aprendizaje, innovación pedagógica, educación.

Abstract

Introduction: This research analyzes the implementation of active learning methodologies in Language and Literature for sixth-grade students at the Pichincha Educational Unit (Manabí, Ecuador), where traditional methods persist due to limited teacher training, scarce institutional support, and a lack of technological resources. Materials and methods: The study employed a mixed-methods approach with a descriptive and correlational non-experimental design, applying surveys to 68 students, classroom observations, and an interview with one teacher, using stratified convenience sampling. Results: The results revealed that 67% of students perceive little or no implementation of active learning methodologies, although 51% prefer hands-on activities over lectures. Observation confirmed the predominance of traditional methods, with a complete absence of play-based strategies and limited use of digital resources (25% of classes). Discussion: The discussion revealed a gap between students' predisposition toward active learning approaches and current teaching practices, highlighting insufficient training, curriculum load, and traditional assessment as barriers. Conclusions: A paradigm shift towards student-centered methodologies is imperative, with ongoing teacher training, adequate resources, and institutional alignment to develop critical and creative competencies that meet the demands of the 21st century.

Keywords: Active methodologies, language and literature, learning, pedagogical innovation, education.

Resumo

Introdução: Esta pesquisa analisa a implementação de metodologias de aprendizagem ativa em Língua Portuguesa para alunos do sexto ano do Ensino Fundamental da Unidade Educacional Pichincha (Manabí, Equador), onde os métodos tradicionais persistem devido à formação docente limitada, ao escasso apoio institucional e à falta de recursos tecnológicos. Materiais e métodos: O estudo empregou uma abordagem mista de métodos, com delineamento descritivo e correlacional não experimental, aplicando questionários a 68 alunos, observações em sala de aula e uma entrevista com um professor, utilizando amostragem estratificada por conveniência. Resultados: Os resultados revelaram que 67% dos alunos percebem pouca ou nenhuma implementação de metodologias de aprendizagem ativa, embora 51% prefiram atividades práticas a aulas expositivas. A observação confirmou a predominância de métodos tradicionais, com ausência completa de estratégias lúdicas e uso limitado de recursos digitais (25% das aulas). Discussão: A discussão revelou uma lacuna entre a predisposição dos alunos em relação às abordagens de aprendizagem ativa e as práticas pedagógicas atuais, destacando a formação insuficiente, a carga curricular e a avaliação tradicional como barreiras. Conclusões: Uma mudança paradigmática em direção a metodologias centradas no aluno é imprescindível, com formação contínua de professores, recursos adequados e alinhamento institucional para desenvolver competências críticas e criativas que atendam às demandas do século XXI.

Palavras-chave: Metodologias ativas, língua e literatura, aprendizagem, inovação pedagógica, educação.

Recibido: 21/7/2025 Aprobado: 4/9/2025

Introducción

La investigación analiza la implementación de las metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media en los estudiantes del sexto año básico de la Unidad Educativa Pichincha, provincia de Manabí-Ecuador. Uno de los principales obstáculos es la limitada formación docente en estrategias didácticas innovadoras, lo que dificulta su aplicación efectiva en el aula. A pesar de la creciente evidencia sobre los beneficios de estas metodologías, muchos docentes continúan utilizando enfoques tradicionales debido a la falta de capacitación y apoyo institucional. Además, la carencia de recursos tecnológicos y materiales didácticos adecuados representa una barrera para la integración de herramientas interactivas que potencien el aprendizaje.

Las metodologías activas son estrategias innovadoras que contribuyen a obtener resultados en el proceso formativo, promueven una participación dinámica del estudiante, a través del uso de materiales didácticos, y estrategias lúdicas (Bonilla et al., 2020). Por lo tanto, adquiere competencias, valores y destrezas a través de trabajos en equipo, la comunicación y la reflexión crítica, para crear ambientes de aprendizajes significativos en el ámbito educativo (Murillo, 2022).

En función a lo descrito por Merino (2024), las metodologías activas son un proceso interactivo, participativo, empleadas para motivar a los estudiantes y construyan su conocimiento, buscan transformar el proceso de enseñanza tradicional, promoviendo la participación activa del alumno y desarrollando competencias críticas y reflexivas.

A nivel global, el desarrollo de metodologías activas responde a la urgente necesidad de formar individuos críticos y adaptables en un mundo caracterizado por cambios constantes y rápidos que se presentan diariamente. Tal como menciona González & Wagenaar (2019). Estas metodologías fomentan habilidades esenciales como el pensamiento crítico, la resolución de problemas y la colaboración, competencias altamente valoradas en la actualidad. La UNESCO y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) han resaltado la importancia de las políticas y prácticas pedagógicas, en dirección a que respondan a los desafíos actuales (UNESCO, 2021).

En Ecuador la implementación de metodologías que garanticen un aprendizaje eficaz ha enmarcado un cambio significativo en la educación de los estudiantes, busca no solo mejorar los resultados académicos, sino también promover una educación inclusiva y equitativa que prepare a los estudiantes para enfrentar los desafíos globales.

“El Ministerio de Educación en el año 2020 mediante su plataforma ME CAPACITO, ejecutó capacitaciones al magisterio fiscal sobre diversas herramientas, metodologías y estrategias, con la finalidad de mejorar la praxis educativa” MINEDUC, (2020). Sin embargo, muchos docentes solo aplican los conocimientos que adquieren de forma teórica o en sus planes curriculares sin llevarlos a la práctica pedagógica. “La personalización del aprendizaje, facilitada por tecnologías educativas, permite atender a la diversidad de estilos y ritmos de aprendizaje, asegurando que cada estudiante pueda avanzar según sus necesidades y potencialidades” (Gómez & Martínez, 2020).

La Unidad Educativa Pichincha, perteneciente al cantón Pichincha de la provincia de Manabí, enfrenta múltiples desafíos en la implementación de metodologías activas en la enseñanza de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media. Una de las barreras es la escasa formación docente en el uso de estrategias pedagógicas innovadoras, lo que dificulta su implementación eficaz en el aula. Pese a los beneficios demostrados, muchos siguen, debido también al poco apoyo institucional. Además, la carencia de recursos tecnológicos y materiales didácticos adecuados representa un obstáculo para la integración de herramientas interactivas que potencien el aprendizaje. La resistencia al cambio, tanto por parte de docentes como de estudiantes y familias, también dificulta la transición hacia un modelo de enseñanza más participativo y centrado en el estudiante. En este contexto, es fundamental que la institución implemente estrategias de capacitación docente, mejore la infraestructura tecnológica y establezca mecanismos de evaluación que permitan consolidar el uso de metodologías activas en la enseñanza de Lengua y Literatura.

La investigación se centra en las metodologías activas que influyan en el aprendizaje de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media de la Unidad Educativa Pichincha, identificando las barreras y facilitadores en su aplicación. A través de lo expuesto se plantea la siguiente interrogante ¿Cómo influyen las metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en los estudiantes de sexto año básico? estableciéndose como objetivo el de analizar las metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura en la básica media de la Unidad Educativa Pichincha del Cantón Pichincha – Manabí.

Metodologías activas

Citando a Márquez Aguirre (2021), “las metodologías activas son enfoques pedagógicos que sitúan al estudiante en el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje, promoviendo su participación activa, la colaboración y la aplicación práctica de los conocimientos adquiridos”.

De acuerdo con Naranjo et. al. (2021), las metodologías activas favorecen significativamente al incluir al estudiante de manera dinámica en su proceso de aprendizaje, lo que mejora la comprensión de los contenidos y la retención de esto mismo. En el contexto de Lengua y Literatura, estas estrategias permiten a los estudiantes interactuar con los textos literarios de manera más profunda, estimulando su capacidad de análisis y expresión.

Teniendo en cuenta a Tagua-Moyolema et al., (2024), “estas metodologías buscan transformar el rol del estudiante de receptor pasivo de información a participante activo, lo que potencialmente mejora tanto el rendimiento académico como la motivación. Además, al involucrar al estudiante en la construcción de su propio conocimiento, se fortalece su capacidad de análisis, pensamiento crítico y toma de decisiones, habilidades fundamentales para enfrentar con éxitos los desafíos del mundo actual.

El nuevo rol docente como formador y motivador se direcciona en orientar al estudiantado hacia el adecuado aprovechamiento de los recursos materiales y tecnológicos, con el fin de sensibilizar y educar a las poblaciones en el tema de alfabetización informacional y mediática, para formar ciudadanos digitales independientes, integrales, críticos y responsables (Aguaded et al., 2021).

Tal como mencionan Mayorga-Ases et al., (2023), “el sistema educativo tradicional enfrenta desafíos, limitaciones que pueden conducir a una disminución de la motivación, el compromiso y el rendimiento académico de los estudiantes.

Las metodologías activas tienen sus raíces en movimientos pedagógicos de finales del siglo XIX y principios del XX, como la "Escuela Nueva", impulsada por pedagogos como Adolphe Ferrière. Este enfoque promovía “una educación centrada en el estudiante, donde el aprendizaje se basaba en la experiencia y la actividad, en contraposición a los métodos tradicionales que priorizaban la memorización y la instrucción directa. La "Escuela Nueva" buscaba “desarrollar la autonomía del alumno, fomentar su pensamiento crítico y adaptarse a sus intereses y necesidades, principios que siguen siendo fundamentales en las metodologías activas actuales” (Educastur, 2021).

“En la actualidad, las metodologías activas han evolucionado y se han diversificado, incorporando tecnologías digitales y adaptándose a las demandas de una sociedad en constante cambio, no solo buscan la adquisición de conocimientos, sino también el desarrollo de competencias transversales como la colaboración, la creatividad y el pensamiento crítico. Sin embargo, su implementación efectiva requiere una formación docente adecuada, recursos apropiados y un entorno educativo que favorezca la innovación y la participación activa del estudiante” (Abarca, 2024).

Según Ernesto & Borda (2021), las metodologías activas se fundamentan en los intereses del educando y se orientan a prepararlo para la vida real. Este enfoque, que pone énfasis en el estudiante, busca fomentar habilidades que van más allá de la adquisición de conocimientos académicos, promoviendo una educación integral.

A continuación, se presentan las nueve características de las metodologías activas, del rol del estudiante y del docente:

Tipos de metodologías activas

Existen varios modelos de metodologías activas con diferentes estrategias, planificaciones, objetivos, pero con todas ellas se logra un desarrollo de la motivación y el pensamiento crítico del estudiando, mejorando su aprendizaje de manera significativa, así tenemos:

Aprendizaje basado en competencias

“El aprendizaje basado en competencias (ABC) se ha consolidado como una metodología activa que pone énfasis en la formación integral del estudiante, orientada a la adquisición de habilidades prácticas y transferibles. Según el enfoque del ABC, el estudiante es considerado el centro del proceso de enseñanza-aprendizaje, asumiendo la responsabilidad de su propio aprendizaje y comprendiendo la utilidad y finalidad de lo que aprende” UNAB (2024). Este modelo abandona las prácticas tradicionales de enseñanza centradas en la transmisión de información, dando mayor importancia al desarrollo de competencias que permitan al estudiante resolver problemas reales en contextos profesionales.

Metodología: Aula invertida

De acuerdo con Escudero-Nahón y Mercado López (2019), “el modelo de Aula Invertida (AI) es una estrategia pedagógica que reconfigura la dinámica tradicional del aula. “La implementación requiere que los docentes diseñen actividades que promuevan la participación de forma activa en los estudiantes, durante las sesiones presenciales. Sin embargo, su éxito depende de la disponibilidad de recursos tecnológicos y de la capacitación docente para gestionar eficazmente este enfoque pedagógico” (p. 76).

Aprendizaje basado en problemas

Según Ortiz Cermeño (2019), el Aprendizaje Basado en Problemas (ABP) es una metodología que utiliza problemas complejos y reales, este enfoque promueve el desarrollo de habilidades de resolución de problemas, pensamiento crítico y trabajo en equipo, permite a los estudiantes integrar conocimientos de diversas áreas, favoreciendo una comprensión más profunda y significativa de los contenidos, requiere una planificación para asegurar que los objetivos de aprendizaje sean alcanzados de manera efectiva.

Metodología: Aprendizaje Basado en el Juego

Es una estrategia pedagógica que utiliza el juego como herramienta para facilitar el aprendizaje, este enfoque permite a los estudiantes adquirir conocimientos y habilidades de manera lúdica y motivadora. El Aprendizaje Basado en el Juego (ABJ) favorece el desarrollo de competencias cognitivas, sociales y emocionales, promoviendo un aprendizaje integral y significativo (García-Peñalvo et al., 2020). La implementación del ABJ requiere que los docentes diseñen actividades que integren elementos lúdicos de manera coherente con los objetivos de aprendizaje.

Desafíos y perspectivas de las metodologías activas

A pesar de los beneficios reconocidos de las metodologías activas, su implementación enfrenta diversos desafíos. Según Villamagua Salazar (2024), en el contexto de la educación ecuatoriana, persisten prácticas pedagógicas tradicionales que favorecen el aprendizaje pasivo y memorístico. La falta de recursos didácticos, la sobrecarga curricular y la escasa formación en el uso de tecnologías educativas. Sin embargo, el autor destaca que las metodologías activas pueden contribuir al desarrollo de la creatividad y el pensamiento crítico en los estudiantes, aspectos esenciales para su formación integral.

Aprendizaje

El aprendizaje es un proceso continuo que implica cambios en la conducta, es el resultado de la experiencia y la interacción con el entorno. No depende del crecimiento biológico, sino de la adquisición de conocimientos, habilidades y valores, para el desarrollo integral del ser humano y su adaptación a nuevas realidades. A través del aprendizaje, se construye la identidad, se mejora el bienestar personal y se potencia el pensamiento crítico (Silva, 2023).

Desde un enfoque investigativo, que, a criterio del autor, el aprendizaje se concibe como un proceso dinámico y multidimensional que trasciende la mera acumulación de información. La noción de que implica cambios en la conducta denota la importancia de considerar tanto los aspectos observables como los internos del individuo, incluyendo la transformación de hábitos, actitudes y habilidades cognitivas. Es particularmente relevante que el aprendizaje no dependa exclusivamente del desarrollo biológico, lo que propone que los contextos sociales, culturales y ambientales juegan un papel fundamental en la adquisición de conocimientos y competencias.

Las teorías del aprendizaje buscan establecer los procedimientos mediante los cuales los seres humanos lograr adquirir el conocimiento, comprendiendo desde los mecanismos de condicionamiento hasta las construcciones cognitivas más complejas. Es así como, desde el modelo conductista, el aprendizaje se centra en la repetición de acciones para fortalecer respuestas consistentes, aplicándose eficazmente en el diseño de estructuras organizativas, objetivo y evaluación académica; sin embargo, es necesario que su conformación este dada dentro de un marco constructivista que también atienda la interacción y el contexto del aprendiz (Herrera et al., 2023).

Por otra parte, el cognitivismo enfatiza la importancia de las experiencias y del desarrollo mental de cada estudiante, considerando elementos de tipo interno, tales como pensamientos y emociones, además, sostiene que el sujeto construye estructuras para procesar y dar sentido a la información recibida. Complementariamente, la teoría del desarrollo cognitivo de Piaget menciona que los aprendizajes se construyen a través de etapas sucesivas de desarrollo intelectual, donde los niños y adolescentes progresan de esquemas simples a estructuras más complejas mediante la asimilación y la acomodación (Ramírez-Trejo, 2021). Frente a perspectivas más tradicionales, estas teorías organizan la enseñanza en torno a la activación de esquemas mentales previos y la facilitación del procesamiento profundo, favoreciendo así la comprensión y la retención de conocimientos a largo plazo.

Tipos de aprendizaje

De acuerdo con Herrera et al. (2023), “los tipos de aprendizaje representan las diversas formas en que los estudiantes adquieren conocimientos, habilidades y valores, reconociendo que cada persona aprende de manera única y no existe un método universal”. Entre ellos, el autor destaca que “el aprendizaje activo se centra en la participación y el intercambio de ideas, mientras que el reflexivo fomenta la aplicación creativa del conocimiento para resolver problemas reales. El aprendizaje teórico organiza la información de manera lógica y estructurada, favoreciendo la comprensión profunda, y los estilos sensoriales —auditivo, visual y kinestésico— permiten procesar la información según los canales preferidos de cada estudiante, integrando sonidos, imágenes o experiencias físicas para fortalecer la retención y la comprensión” Herrera et al. (2023).

Por su parte, los aprendizajes lógico-matemático, social e intrapersonal se enfocan en el desarrollo de habilidades analíticas, colaborativas y de autorreflexión. El aprendizaje lógico-matemático promueve la construcción de conceptos mediante razonamiento y análisis, mientras que el social favorece la interacción en grupos y la consideración de diferentes perspectivas. Finalmente, el intrapersonal facilita la concentración y el aprendizaje autónomo en entornos más tranquilos, permitiendo al estudiante consolidar sus conocimientos sin distracciones externas.

Enfoques en el aprendizaje

A lo largo de los años el aprendizaje no solo se limita a la adquisición de información, así mismo involucra el desarrollo de habilidades cognitivas, emocionales y sociales. La neuroeducación ha aportado nuevos aspectos sobre cómo los estudiantes aprenden y mejoran sus conocimientos y comportamientos a través de experiencias, sugiriendo que las emociones y la interacción social son esenciales en los procesos de aprendizaje (Apolo, et al., 2024).

Desde una perspectiva psicopedagógica, Piaget define el aprendizaje como un proceso activo en el que las personas construyen y reorganizan su conocimiento a partir de experiencias. Para Vygotsky, el aprendizaje es una experiencia social que surge de la interacción con otras personas Barros (2023), la visión de Piaget como la de Vygotsky reflejan lo que ocurre en el aula aprendemos no solo al experimentar el mundo, sino transformar lo que vivimos en conocimiento, a través del diálogo, la colaboración y la interacción constante entre docentes y estudiantes.

Factores pedagógicos que afectan el aprendizaje

El aprendizaje activo, que implica la participación, colaboración y reflexión activa, ha mostrado un impacto positivo en cursos de ciencias e ingeniería. “Un metaanálisis de 225 estudios, revelo que esta metodología reduce la tasa de fracaso del 32 % al 21 % y mejora el desempeño estudiantil en casi 0,5 desviaciones estándar” (Freeman et al., 2021)

Enseñanza-aprendizaje

El proceso de enseñanza-aprendizaje (PEA) se concibe como el espacio en el cual el principal protagonista es el estudiante y el docente cumple con una función de facilitador de los procesos de aprendizaje. Son los alumnos quienes construyen el conocimiento a partir de leer, de aportar sus experiencias y reflexionar sobre ellas, de intercambiar sus puntos de vista con sus compañeros y el docente Abreu, et al., (2021). En este contexto, se pretende que el alumno disfrute el aprendizaje y se comprometa con él de por vida, mientras el docente actúa como guía fomentando la participación activa y el interés por el aprendizaje.

Lengua y Literatura

El área de Lengua y Literatura es esencialmente procedimental, por lo tanto, promoverá que los estudiantes ejerciten de manera ordenada habilidades lingüístico-comunicativas que les permitan el uso eficiente de la lengua. Las destrezas que se presentan facilitan que los estudiantes, con la ayuda del docente, exploren, usen, ejerciten e interioricen un conjunto de procesos lingüísticos implicados en usos discursivos específicos (Educación, 2020).

Desde una perspectiva crítica y reflexiva, se considera que la implementación de metodologías activas en la enseñanza de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media es fundamental para responder a las demandas educativas del siglo XXI. Estas estrategias no solo enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje, sino que también empoderan al estudiante, desarrollando su autonomía, pensamiento crítico y capacidad de colaboración. Es imperativo que los docentes se capaciten continuamente en estas metodologías para garantizar una educación de calidad que prepare a los estudiantes para enfrentar los desafíos de una sociedad en constante cambio.

Materiales y métodos

En investigaciones realizadas en el área de educación, la selección de un diseño metodológico adecuado resulta esencial para garantizar la validez de los resultados, principalmente cuando se analizan fenómenos pedagógicos vinculados al uso de metodologías activas. Tal como mencionan Mayorga-Ases et al. (2023), los métodos tradicionales limitan la motivación y el desarrollo integral del estudiante, lo que hace indispensable implementar enfoques de corte mixto que permitan comprender tanto la dimensión cuantitativa como cualitativa del aprendizaje.

En este sentido, la investigación se desarrolló bajo un diseño no experimental, de tipo descriptivo y correlacional, dado que no se manipulan variables de forma intencional, sino que se analizan las condiciones en las que se implementan las metodologías activas en el contexto educativo. Se busca describir la situación actual, identificar sus limitaciones y analizar la relación entre su aplicación y el desempeño académico de los estudiantes. Para ello, se adopta un enfoque mixto de tipo cuantitativo y cualitativo, fundamentado en la recolección y análisis de datos recogidos en el contexto de la Unidad Educativa Pichincha durante el año lectivo 2024-2025, lo que permitió conocer las diferentes metodologías activas que el docente planifica en un periodo académico vigente.

La población de estudio estuvo conformada de 185 involucrados de básica media y un docente. Para la investigación, se determinó una muestra representativa de 68 estudiantes de sexto año básico. El tipo de muestreo utilizado es por conveniencia estratificado, dado que la población se segmentó en dos subgrupos (estudiantes, un docente) para garantizar una distribución equitativa y característica de los datos, asegurando la representatividad de ambos.

Para el desarrollo del análisis se emplearon diversos métodos de investigación, entre ellos el método deductivo, que permitió partir de teorías generales sobre las metodologías activas para contrastarlas con la realidad educativa del estudio; el método inductivo, que posibilitó la identificación de patrones y tendencias a partir de la información recopilada; y el método estadístico, utilizado para procesar y analizar los datos cuantitativos obtenidos a través de encuestas estructuradas.

El proceso metodológico inició con una revisión teórica y conceptual sobre las metodologías activas, con el propósito de sustentar el marco de referencia de la investigación. Posteriormente, se diseñaron instrumentos de recolección de datos basado en encuestas estructuradas dirigidas a estudiantes de sexto año básico, ficha de observación y entrevista al docente de la asignatura de Lengua y Literatura, con el objetivo de identificar las prácticas pedagógicas activas utilizada por el docente dentro del aula.

Resultados

Objetivo. - Identificar la percepción de los estudiantes de Educación Básica Media de la Unidad Educativa Pichincha sobre el uso de metodologías activas en el aprendizaje de Lengua y Literatura.

1. ¿En las clases de Lengua y Literatura, el docente utiliza juegos o actividades dinámicas para enseñar?

Gráfico 1 JUEGOS, DEBATES O ACTIVIDADES DINÁMICAS

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

Los resultados de la pregunta indican que el 38% de los estudiantes están en total desacuerdo y el 29% en desacuerdo, sumando un 67% que percibe escasa o nula implementación de metodologías activas en el aula. Solo un 5 % afirmó estar de acuerdo. El 28% adoptó una postura neutral, posiblemente por falta de claridad sobre estas estrategias. Estos resultados reflejan una enseñanza poco participativa, lo que limita el desarrollo de aprendizajes significativos e inclusivos.

2. Prefiero aprender a través de actividades prácticas y no solo escuchar la explicación del docente

Gráfico 2 ACTIVIDADES PRÁCTICAS

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

El 51% de los estudiantes prefieren aprender mediante actividades prácticas en lugar de solo escuchar la explicación del docente, mientras que un 16% está de acuerdo y un 24% se mantiene neutral. Solo un 9 % está en desacuerdo y total desacuerdo. Estos resultados indican una alta inclinación hacia metodologías activas, reflejando la necesidad de transformar las prácticas docentes tradicionales, a enfoques que favorezcan la participación, experimentación y aplicación contextual del conocimiento.

3. Me siento motivado/a para participar en las actividades de Lengua y Literatura

Gráfico 3 SE SIENTE MOTIVADO PARA PARTICIPAR EN ACTIVIDADES

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

Según los resultados obtenidos, el 22% de los estudiantes se siente motivados para participar en las actividades, mientras que el 32% manifiesta estar de acuerdo, lo que representa un 54% percepciones positivas. Sumando un 28% con actitudes desfavorables hacia la asignatura. El 18% se mantiene neutral, lo cual podría indicar una falta de vinculación con las actividades la urgencia de implementar metodologías activas que fomenten la participación y despierten mayor interés por el área, considerando las diferencias individuales en la respuesta emocional y cognitiva frente a las prácticas pedagógicas.

4. Después de participar en actividades activas, siento que entiendo mejor los textos literarios que leemos en clase

Gráfico 4 APRENDIZAJE ACTIVO

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

Los resultados reflejan que un 64% de los estudiantes comprenden mejor los textos literarios tras participar en actividades activas, el 24% totalmente de acuerdo y de acuerdo 40% estos datos reflejan una tendencia positiva hacia la efectividad de las metodologías activas en el desarrollo de la competencia lectora. Un 21% con respuesta neutral lo que sugiere la necesidad de profundizar en estrategias más inclusivas o personalizadas. El 14% expresó en desacuerdo, y totalmente en desacuerdo el 1% lo que podría estar relacionado con estilos de aprendizaje diversos o barreras pedagógicas específicas.

5. Considero que el uso de metodologías activas, ha mejorado el desempeño académico en Lengua y Literatura

Gráfico 5 USO DE METODOLOGIAS ACTIVAS

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

Según los datos obtenidos 41% que está totalmente de acuerdo y un 31% de acuerdo. Este dato evidencia una valoración positiva mayoritaria hacia estrategias como el aprendizaje basado en proyectos, aula invertida o gamificación. Solo un 4% expresó totalmente en desacuerdo, y un 24% una postura neutral, lo que sugiere oportunidades para fortalecer la motivación y comprensión en ciertos grupos, a enfoques participativos en el desarrollo de habilidades lingüísticas.

Guía de observación a docente

Objetivo. - Observar las estrategias metodológicas activas que utiliza el docente en el desarrollo de las clases de Lengua y Literatura en la Educación Básica Media de la Unidad Educativa Pichincha.

Tabla 1.- Ficha de observación realizada al docente en la clase de Lengua y Literatura

Ítems

Si

%

No

%

Total

%

Los estudiantes expresan ideas y opiniones.

3

75 %

1

25 %

4

100 %

Responden preguntas del docente o compañeros.

3

75 %

1

25 %

4

100 %

Se involucran en actividades grupales.

4

100 %

0

0 %

4

100 %

Se emplean materiales concretos o digitales.

1

25 %

3

75 %

4

100 %

Se utilizan lecturas motivadoras y dinámicas.

2

50 %

2

50 %

4

100 %

Se aplican estrategias lúdicas o interactivas.

0

0 %

4

100 %

4

100 %

Los estudiantes identifican ideas principales en textos.

0

0 %

4

100 %

4

100 %

Relacionan los contenidos con su vida cotidiana.

0

0 %

4

100 %

4

100 %

Resuelven actividades escritas o digitales con éxito.

1

25 %

3

75 %

4

100 %

Analizan y argumentan sobre los temas tratados.

2

50 %

2

50 %

4

100 %

Realizan preguntas reflexivas sobre los textos.

1

25 %

3

75 %

4

100 %

Expresan ideas propias con coherencia.

0

0 %

4

100 %

4

100 %

Fuente: Unidad Educativa “Pichincha”

La tabla 1 presenta las observaciones realizadas en 4 clases de Lengua y Literatura, en las cuales se obtienen resultados basados en indicadores que limitan el impacto pedagógico de las metodologías activas en el aprendizaje de la asignatura, en este nivel de estudio. Aunque se observa que el 100 % de las clases fomentaron la participación grupal y que el 75 % permitieron la expresión de ideas y respuestas orales, estas acciones parecen no estar suficientemente integradas a un enfoque metodológico activo, crítico y significativo. Es decir, la participación observada no necesariamente implica aprendizajes profundos, especialmente si se considera que solo en el 25 % de los casos se utilizaron materiales concretos o digitales, y que las lecturas motivadoras apenas se aplicaron en el 50 % de las clases, reflejando una limitada implementación de recursos que promuevan experiencias multisensoriales, condición clave para activar procesos cognitivos complejos, de acuerdo con el marco del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA).

Las metodologías están alejadas del aprendizaje activo: el 100 % de las clases carecieron de estrategias lúdicas o interactivas. Esto afecta el desarrollo de competencias interpretativas, reflexivas y argumentativas, esenciales en el área de Lengua y Literatura. La carencia de análisis temáticos, preguntas reflexivas y expresión coherente de ideas plantea un escaso desafío cognitivo y motivación pedagógica; por lo que es fundamental fortalecer la práctica docente y la formación en metodologías activas para lograr una enseñanza más inclusiva, participativa y transformadora.

Resultado de la entrevista aplicada a docente

La entrevista realizada al docente de Lengua y Literatura de la Unidad Educativa “Pichincha” se sintetiza en que su práctica pedagógica se apoya fundamentalmente en métodos tradicionales como la exposición oral, el análisis de textos y la escritura dirigida. Aunque incorpora algunas estrategias activas como la lectura en voz alta y el trabajo en grupo, reconoce que su uso es limitado por factores como la carga curricular y la falta de formación específica. El docente está abierto a nuevas metodologías, pero considera esencial contar con acompañamiento y capacitación para aplicarlas de forma más efectiva.

Respecto a los recursos, no utiliza con regularidad herramientas tecnológicas debido a su desconocimiento y a limitaciones institucionales. Prefiere trabajar con materiales impresos y guías propias, empleando técnicas sencillas que buscan motivar el interés por la lectura y la escritura. Reconoce que las metodologías activas aumentan la participación de los estudiantes, pero señala que la evaluación tradicional limita la valoración integral de sus habilidades. Recomienda fortalecer la capacitación docente y combinar lo tradicional con lo innovador para mejorar el aprendizaje en Lengua y Literatura.

Análisis de entrevista al docente

La información recopilada en la entrevista realizada al docente de Lengua y Literatura muestra que, aunque ha incorporado algunas metodologías activas en su enseñanza, su enfoque sigue estando predominantemente centrado en métodos tradicionales. A pesar de intentar utilizar herramientas tecnológicas y enfoques participativos, la aplicación de estas estrategias es limitada y no se mantiene de manera consistente a lo largo del curso. Esta falta de integración efectiva de metodologías activas puede estar restringiendo el potencial de los estudiantes para desarrollar una comprensión más profunda y dinámica de los contenidos literarios, así como sus habilidades lingüísticas y expresivas. Además, la evaluación en el aula sigue enfocándose en pruebas escritas y análisis de textos, lo cual no refleja completamente el desarrollo de los estudiantes en términos de habilidades creativas y colaborativas.

La problemática principal está dada por la falta de un enfoque equilibrado y flexible que combine las metodologías tradicionales con las activas de manera coherente y constante. Aunque se reconoce la importancia de las metodologías activas, la implementación no es lo suficientemente estructurada ni adaptada a las necesidades diversas de los estudiantes, esto genera una brecha en el aprendizaje, ya que algunos estudiantes no logran aprovechar las oportunidades para interactuar de manera significativa con los contenidos y desarrollar sus competencias lingüísticas de forma integral. Además, la evaluación tradicional no logra captar el progreso de los estudiantes en su totalidad, lo que limita la retroalimentación efectiva y el acompañamiento adecuado en su proceso de aprendizaje.

Discusión

Los resultados obtenidos en la investigación confirman que el educador de Lengua y Literatura en la Unidad Educativa Pichincha, tiene una necesidad pedagógica de implementar metodologías activas existe una limitada práctica docente, a pesar de la alta predisposición del estudiante hacia enfoques de aprendizaje dinámicos y participativos, con lo citado por Mayorga-Ases et al. (2023), quienes sostienen que la enseñanza tradicional centrada en la transmisión de información limita la motivación y el desarrollo integral del estudiante.

La aplicación de metodologías activas es escasa se desarrollan entornos tradicionales, existen barreras a una transformación educativa de nuevas estrategias pedagógicas, estudios han destacado que el aprendizaje en el área de Lengua y Literatura debe propiciar el pensamiento crítico, la argumentación y la expresión creativa (Abreu et al., 2021).

No basta en capacitar al docente, es transformar sus creencias, actitudes y prácticas, adaptadas en paradigmas instruccionales. El temor a perder el control del aula, la presión por cumplir contenidos y la evaluación estandarizada continúan limitando la innovación didáctica. Como sustenta González y Wagenaar (2019), enseñar en el siglo XXI implica formar ciudadanos críticos, creativos y comprometidos, lo cual no se logra únicamente con técnicas, sino con una transformación del enfoque educativo.

Los estudiantes deben ser sujetos activos del aprendizaje, en necesidades, intereses y estilos cognitivos, mediante prácticas que fomenten la comprensión crítica, la argumentación y la creatividad, como lo destacan Márquez Aguirre (2021) y Tagua-Moyolema et al. (2024). Las estrategias didácticas son un conjunto de técnicas y modelos educativos que permiten aumentar la capacidad de organizar la información de forma lógica en donde se pueden constituir percepciones de conceptos innovadores reconociendo el objetivo de la clase (Loor, 2022).

La innovación metodológica y su praxis en el aula también fue identificada en la entrevista al docente, confirmando la tesis de Villamagua Salazar (2024), quien argumenta que uno de los principales obstáculos en la implementación de metodologías activas es la falta de capacitación estructural y continua del docente. La observación sistemática comprobó carencias relevantes en cuanto al uso de recursos lúdicos, estrategias colaborativas y materiales digitales, aspectos fundamentales en el marco del Diseño Universal para el Aprendizaje (DUA), que busca la equidad y accesibilidad en los procesos educativos (Gómez & Martínez, 2020).

El alto porcentaje de estudiantes afirmó comprender mejor los textos tras participar en actividades activas reafirma el valor de metodologías como el aprendizaje basado en proyectos, el aula invertida o el juego educativo, todas ellas comprobada para estimular procesos cognitivos (Escudero-Nahón & Mercado López, 2019; García-Peñalvo et al., 2020). Sin embargo, la falta de una cultura institucional orientada a la innovación educativa dificulta su aplicación sistemática. Por tanto, la presente investigación no solo expone una problemática concreta, sino que confirma lo señalado por UNESCO (2021), respecto a que el cambio educativo implica una transformación sistémica, en la que la formación docente, el acompañamiento pedagógico, la infraestructura y la política educativa deben alinearse hacia un paradigma centrado en el estudiante, el pensamiento crítico y la formación integral.

Conclusiones

La investigación permitió analizar que el docente no aplica metodologías activas, sino modelos tradicionales, por lo tanto, el educador debe experimentar prácticas pedagógicas innovadoras, que permitan incluir al estudiante como el centro del proceso, conduciéndolo hacia el reconocimiento de su capacidad creativa, pensamiento crítico y adquisición de aprendizajes significativos. Es primordial que los docentes tengan en claro lo que son las estrategias metodológicas: herramientas que funcionan para ser aplicadas de manera creativa; que pueden facilitar la ejecución del aprendizaje que se realiza en el aula de clases con relación a la guía didáctica que deben tener los docentes (Loor & Alarcón, 2021). En el aula de clase de sexto año básica, se aplican de manera ineficiente las estrategias de lectura y escritura: la planificación es escasa y poco pertinente con la edad de los estudiantes, intereses y habilidades.

Los estudiantes tienen una predisposición positiva hacia la aplicación de metodologías activas, que involucran actividades prácticas, colaborativas y lúdicas, que favorecen la comprensión lectora, la motivación y el desempeño académico, lo que refuerza la necesidad de incorporarlas de manera planificada en el currículo de Lengua y Literatura lo que evidencia un potencial no aprovechado en el proceso de enseñanza-aprendizaje. La formación docente es limitada en estrategias activas, junto con la escasez de recursos tecnológicos y pedagógicos, constituyen barreras relevantes que impiden una implementación de estas metodologías en el aula.

Referencias

Abreu, Y., Barrera, A., Breijo, T., & Bonilla, I. (2021). El proceso de enseñanza-aprendizaje de los Estudios Lingüísticos: su impacto en la motivación hacia el estudio de la lengua. Mendive. Revista de Educación, 19(4), 1234-1250.

Abarca, Z. A. (2024). Metodologías activas en Ecuador: Aproximación a la revisión de literatura de aprendizaje basado en proyectos, aprendizaje basado en problemas y aula invertida. MLS Educational Research, 9(1), 1-15.

Aguaded, I., Delgado-Ponce, Á., & Jaramillo-Dent, D. (2021). Currículum Alfamed de formación de profesores en educación mediática. MIL (Media and Information Literacy) en la era pos-COVID-19. Editorial Octaedro.

Apolo, D., Cisneros, C., Mendez, J., Muñoz, M., Moreira, A., & Vasquez, I. (2024). Neuroeducación: aplicaciones de la neurociencia para mejorar la enseñanza. South Florida Journal of Development, 5(12), 234-250. https://doi.org/10.46932/sfjdv5n12-014

Barros, E. (2023). Metodologías activas en el proceso enseñanza aprendizaje basadas en proyectos. Universidad Estatal Península de Santa Elena. https://repositorio.upse.edu.ec/handle/46000/9862

Bonilla, M., Benavides, J., Espinoza, F., & Castillo, D. (2020). Estrategias metodológicas interactivas para la enseñanza y aprendizaje en la educación superior. Revista Científica UISRAEL.

Dewey, J. (1995). Democracia y educación. Ediciones Morata.

Educastur. (2021). ¿Qué son las metodologías activas? https://edublog.educastur.es/eoeblog/2021/01/28/que-son-las-metodologias-activas/

Ernesto, A., & Borda, G. (2021). Metodología activa como estrategia didáctica en el desarrollo del pensamiento crítico. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar, 5(5), 8538–8558. https://doi.org/10.37811/cl_rcm.v5i5.939

Escudero-Nahón, A., & Mercado López, E. P. (2019). Uso del análisis de aprendizajes en el aula invertida: una revisión sistemática. Apertura, 11(2), 72-85. https://doi.org/10.32870/Ap.v11n2.1546

Freeman, S., Eddy, S. L., McDonough, M., Smith, M. K., Okoroafor, N., Jordt, H., & Wenderoth, M. P. (2014). Active learning increases student performance in science, engineering, and mathematics. Proceedings of the National Academy of Sciences, 111(23), 8410–8415. https://doi.org/10.1073/pnas.1319030111

García-Peñalvo, F. J., García-Holgado, A., & García-Peñalvo, S. (2020). Aprendizaje basado en el juego: una revisión de la literatura. Educación XX1, 23(2), 11-35. https://doi.org/10.5944/educxx1.23816

Gómez, L., & Martínez, P. (2020). Personalización del aprendizaje y uso de tecnologías educativas. Revista de Educación y Tecnología, 15(2), 45-60.

González, A., & Wagenaar, R. (2019). Competencias clave para el siglo XXI: Un marco de referencia europeo. Ediciones de la Universidad de Salamanca.

Herrera, Y. R., Tenelada, D. V., Basantes, M. D., & Erazo, P. J. (2023). Teorías y modelos sobre los estilos de aprendizaje. Edumecentro, 15, 1-19. http://scielo.sld.cu/scielo.php?pid=S2077-28742023000100030&script=sci_arttext

Loor, A. (2022). Estrategia Didáctica para el Fortalecimento de los Estilos de Aprendizaje de los Estudiantes de Tercero Año de Bachillerato General Unificado da Unidad Educativa Pedro Agustín López Ramos. Polo del Conocimiento, 7(6), 123-145.

Loor, K., & Alarcón, L. (2021). Estrategias metodológicas creativas para potenciar los Estilos de Aprendizaje. Revista San Gregorio, 1(48), 1-14. http://scielo.senescyt.gob.ec/scielo.php?pid=S2528-79072021000500001&script=sci_arttext

Márquez Aguirre, A. (2021). Metodologías activas: ¿Sabes en qué consisten y cómo aplicarlas? UNIR Revista. https://www.unir.net/revista/educacion/metodologias-activas/

Mayorga-Ases, J., Flores-Romero, E., & García-Mora, M. (2023). Desafíos de la enseñanza tradicional y propuestas innovadoras en el proceso de aprendizaje. 593 Digital Publisher, 8(2), 1-14.

Merino, F. M. (2024). Metodologías Activas para Impulsar el Proceso Enseñanza-Aprendizaje. Otros Horizontes, Otros Desafíos. Ciencia Latina.

Ministerio de Educación. (2020). Educación General Básica. https://educacion.gob.ec/educacion_general_basica/

Ministerio de Educación. (2020). Política Nacional de Educación: Transformación y Calidad. https://educacion.gob.ec/politica-nacional-de-educacion/

Murillo, I. D. (2022). Metodologías activas en la enseñanza-aprendizaje de lengua y literatura de los estudiantes del subnivel medio de la escuela "Sebastián de Benalcázar". [Tesis de grado, Universidad Técnica Estatal de Quevedo].

Naranjo, P., González, L., & Martínez, A. (2021). Metodologías activas en la enseñanza secundaria: Retos y oportunidades. Revista de Investigación Educativa, 39(1), 115-130.

Ortiz Cermeño, E. (2019). El aprendizaje basado en problemas como experiencia de innovación y mejora docente universitaria. Perfiles educativos, 41(164), 208-213. https://doi.org/10.14482/INDES.30.1.303.661

Ramírez-Trejo, D. A. (2021). Teoría del Desarrollo Cognitivo. UNO Sapiens Boletín Científico de la Escuela Preparatoria No. 1, 4(7), 18-20. https://repository.uaeh.edu.mx/revistas/index.php/prepa1/issue/archive

Silva, L. (2023). Metodología activa y el aprendizaje de lengua y literatura de la básica media de la Unidad Educativa Andina. [Tesis de grado, Universidad Técnica de Ambato]. https://repositorio.uta.edu.ec/handle/123456789/39140

Tagua-Moyolema, A., Muyulema-Muyulema, D., & Velastegui-Hernández, R. S. (2024). Análisis de la relación entre el uso de tecnologías educativas y el rendimiento académico de los estudiantes universitarios. 593 Digital Publisher CEIT, 9(4-1), 184–195. https://doi.org/10.33386/593dp.2024.4-1.2738

UNAB. (2024). Aprendizaje basado en competencias (ABC). Vinculación UNAB. https://vinculacion.unab.cl/wiki/aprendizaje-basado-en-competencias-abc/

UNESCO. (2021). Transformando la educación: Metodologías activas para un aprendizaje efectivo. Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura.

Villamagua Salazar, D. M. (2024). Metodologías activas como necesidad educativa para desarrollar la creatividad estudiantil del siglo XXI. Ciencia Latina Revista Científica Multidisciplinar, 8(4), 9548–9580. https://doi.org/10.37811

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

Declaración de responsabilidad de autoría

Los autores del manuscrito señalado, DECLARAMOS que hemos contribuido directamente a su contenido intelectual, así como a la génesis y análisis de sus datos; por lo cual, estamos en condiciones de hacernos públicamente responsable de él y aceptamos que sus nombres figuren en la lista de autores en el orden indicado. Además, hemos cumplido los requisitos éticos de la publicación mencionada, habiendo consultado la Declaración de Ética y mala praxis en la publicación.

María Fernanda Pazmiño Moreira y Eddy Favián Solórzano Solórzano: Proceso de revisión de literatura y redacción del artículo.