Maestro y Sociedad e-ISSN 1815-4867
Volumen 22 Número 3 Año 2025
Artículo original
La formación estético profesional en el educador de la primera infancia
The aesthetic professional training in the educator of first infancy
Formação estética profissional no educador de infância
Katia Vaillant Serrano 1*, https://orcid.org/0000-0001-6499-0582
Dr. C. Ariolki Fumero Pérez 2, https://orcid.org/0000-0002-1598-1492
Dr. C. Irelis de la Caridad Escalona Vázquez 3, https://orcid.org/0000-0002-5608-240X
1 Escuela Pedagógica Floro Regino Pérez Díaz de Santiago de Cuba, Cuba
2, 3 Universidad de Oriente, Cuba
*Autor para correspondencia. email vaillantkatia31@gmail.com
Para citar este artículo: Vaillant Serrano, K., Fumero Pérez, A. y Escalona Vázquez, I. C. (2025). La formación estético profesional en el educador de la primera infancia. Maestro y Sociedad, 22(3), 1910-1916. https://maestroysociedad.uo.edu.cu
RESUMEN
Introducción: La formación de educadores de la primera infancia es una labor vital que necesita constante actualización y contextualización para lograr profesionales capaces de enfrentar con creatividad la labor educativa en niños preescolares. Es imprescindible su formación general e integral ya que no solo va a ejercer influencias educativas, morales y éticas en niños, sino en familiares y en la comunidad. Uno de los pilares para lograr este objetivo lo constituye la formación estético profesional que brinda habilidades éticos profesionales, culturales y artísticos para dirigir la atención educativa de niños de 0 a 6 años en ambas modalidades. Materiales y métodos: La presente investigación argumenta este requisito, a la vez que demuestra su necesidad para el logro del modo de actuación en correspondencia con el perfil del egresado. Para ello se emplearon los métodos análisis documental, entrevista y talleres de socialización con especialistas. Resultados: La realización de esta investigación permitió asegurar que el tratamiento estético desde la grada curricular aún es insuficiente y que es necesario concebir la formación estética de este profesional a través de un enfoque interdisciplinar hacia la estética y todo lo que esta conlleva. Discusión: La formación estético - profesional del educador de la primera infancia es fundamental para la transformación de su desempeño laboral, ya que permite expresar habilidades estéticas y culturales acordes al profesional que exige nuestra sociedad actual, a la vez que estimula a los niños de la primera infancia hacia el gusto estético y defensa de nuestra identidad mediante su ejemplo personal. Conclusiones: Las insuficiencias teóricas y prácticas conducen a la necesidad de sistematizar los presupuestos teóricos y metodológicos que sustentan la formación estético - profesional con carácter interdisciplinar contextualizado a escuelas pedagógicas, con énfasis en la especialidad Educador de la Primera Infancia, por ser el profesional que inicia la formación de las futuras generaciones.
Palabras clave: estética, educación estética, educador de la primera infancia, formación estético profesional, interdisciplinariedad.
Abstract
Introduction: The training of early childhood educators is a vital task that requires constant updating and contextualization to achieve professionals capable of creatively addressing the educational task of preschool children. Their general and comprehensive training is essential since it will not only exert educational, moral, and ethical influences on children, but also on their families and the community. One of the pillars for achieving this objective is professional aesthetic training, which provides professional, ethical, cultural, and artistic skills to direct the educational care of children from 0 to 6 years of age in both modalities. Materials and methods: This research argues this requirement, while demonstrating its necessity for achieving the mode of action that corresponds to the graduate profile. For this purpose, the following methods were employed: documentary analysis, interviews, and socialization workshops with specialists. Results: This research made it possible to ascertain that the aesthetic treatment from the curricular level is still insufficient and that it is necessary to conceive the aesthetic training of this professional through an interdisciplinary approach to aesthetics and everything it entails. Discussion: The aesthetic-professional training of early childhood educators is essential for the transformation of their work performance, as it allows them to express aesthetic and cultural skills in line with the professional demands of our current society, while also encouraging early childhood children to develop aesthetic taste and defend our identity through their personal example. Conclusions: Theoretical and practical shortcomings lead to the need to systematize the theoretical and methodological assumptions that support interdisciplinary aesthetic-professional training contextualized to pedagogical schools, with an emphasis on the Early Childhood Educator specialty, as it is the professional who initiates the training of future generations.
Keywords: aesthetics, aesthetic education, early childhood educator, aesthetic-professional training, interdisciplinarity.
Resumo
Introdução: A formação de educadores da primeira infância é uma tarefa vital que requer constante atualização e contextualização para formar profissionais capazes de abordar criativamente a tarefa educativa de crianças em idade pré-escolar. Sua formação geral e integral é essencial, pois exercerá influências educacionais, morais e éticas não apenas nas crianças, mas também em suas famílias e na comunidade. Um dos pilares para atingir esse objetivo é a formação profissional em estética, que proporciona competências profissionais, éticas, culturais e artísticas para direcionar o atendimento educacional de crianças de 0 a 6 anos em ambas as modalidades. Materiais e métodos: Esta pesquisa argumenta essa exigência, ao mesmo tempo em que demonstra sua necessidade para alcançar o modo de atuação correspondente ao perfil do egresso. Para tanto, foram utilizados os seguintes métodos: análise documental, entrevistas e oficinas de socialização com especialistas. Resultados: Esta pesquisa permitiu constatar que o tratamento estético desde o nível curricular ainda é insuficiente e que é necessário conceber a formação estética desse profissional por meio de uma abordagem interdisciplinar da estética e de tudo o que ela implica. Discussão: A formação estético-profissional de educadores infantis é essencial para a transformação de sua atuação profissional, pois lhes permite expressar competências estéticas e culturais condizentes com as demandas profissionais da sociedade atual, além de estimular nas crianças da primeira infância o gosto estético e a defesa de sua identidade por meio do exemplo pessoal. Conclusões: As lacunas teóricas e práticas levam à necessidade de sistematizar os pressupostos teóricos e metodológicos que sustentam a formação estético-profissional interdisciplinar contextualizada às escolas pedagógicas, com ênfase na especialidade de Educador Infantil, por ser o profissional que inicia a formação das futuras gerações.
Palavras-chave: estética, educação estética, educador infantil, formação estético-profissional, interdisciplinaridade.
Recibido: 15/4/2025 Aprobado: 2/7/2025
Introducción
La preparación de docentes en Cuba es esencial, pues se alinea con la sólida tradición educativa del país, las necesidades emergentes de su pueblo y las pautas internacionales. En particular, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos en la Agenda 2030, priorizan la Educación de calidad, lo que queda explícito en el (ODS) 4 referido a “Garantizar una educación inclusiva y equitativa de calidad y promover oportunidades de aprendizaje permanente para todos.” (Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 2016; p. 16).
El principal objetivo de la educación en Cuba es formar a niños, jóvenes y adolescentes, como a todo el pueblo en general, en la concepción científica del mundo o la del materialismo dialéctico e histórico. Se persigue la estimulación de las capacidades intelectuales, físicas y espirituales del individuo; incentivar sentimientos, valores y gustos estéticos; transformar principios ideológicos, políticos y morales comunistas en principios personales y hábitos de conducta cotidiana, acorde a una personalidad libre y culta, apta para coexistir con los demás, mientras participa de forma activa y responsable en la construcción del socialismo.
En este sentido, se infiere la idea de que la educación cubana debe formar individuos capaces de observar el mundo de manera crítica y a la vez dotarlos de las herramientas necesarias para que se sientan en condiciones de cambiarlo en beneficio de la sociedad. Para ello, las escuelas pedagógicas deben desempeñar un papel protagónico, ya que son las instituciones encargadas de la formación de educadores que trabajarán en los distintos niveles de enseñanza según la especialidad escogida.
Disímiles investigaciones y experiencias pedagógicas aportan al perfeccionamiento del proceso formativo relativo a estas escuelas, entre ellas: Chapé y Quiala (2019); Hernández (2020); González Hidalgo y Lombillo (2021); Caballero, Paz y Rodríguez (2021) y Addine (2022). Estos autores en general, conciben la formación como proceso y resultado de un conjunto de actividades organizadas de modo sistemático y coherente, que permiten al individuo poder actuar de manera consciente y creadora; lo que garantiza la preparación necesaria para desempeñarse como un sujeto activo de su aprendizaje y desarrollo, capaz de movilizar recursos afectivos y cognitivos desde una perspectiva integral. Se trata de un proceso de suma importancia en aras de lograr la calidad requerida, el cumplimiento del rol profesional del maestro y sus dos tareas básicas: instruir y educar.
La formación docente es inherente al proceso de desarrollo del profesional de la educación, relacionada con la necesidad del docente como acción y efecto de formar y formarse, de autoformarse y convertirse en agente de formación. Esto incluye un conjunto de procesos a través de los cuales los profesores aprenden a aprender y a comprender, a analizar y a reflexionar en su labor diaria; es un proceso continuo y de larga duración que no se agota durante la fase de la formación inicial; mejora los conocimientos referentes a la actuación, las estrategias y las actitudes de quienes trabajan en las instituciones educativas. Su meta principal es estimular el aprendizaje de los educandos, mediante la mejora de la actuación del profesorado.
Es válido reflexionar sobre la urgencia de un modelo profesional pedagógico que contribuya a la formación integral de la personalidad de niños, adolescentes y jóvenes, dirigido a la asimilación de conocimientos, hábitos, valores y habilidades necesarios para su inserción en la sociedad.
En la actualidad, a la labor educativa se le impone el reto de formar individuos cada vez más sensibles, con capacidad para apreciar lo bello, lo trágico, lo sublime, lo heroico tanto en el arte, como en el actuar del ser humano, en la naturaleza y en la sociedad, en aras de proteger el patrimonio cultural local, nacional y universal, como una vía para la defensa de nuestra identidad; de ahí la necesidad de que la formación estética gane más espacio en los procesos que tienen lugar dentro y fuera de las escuelas pedagógicas. Pero es precisamente el Educador de la Primera Infancia el encargado de conducir a los niños de 0 a 6 años hacia experiencias estéticas y formar en ellos sentido crítico a través de un proceso de sensibilización con todo lo que les rodea.
Desde los primeros años de la Revolución, se ha concebido la educación estética como una herramienta para preservar nuestra identidad cultural y defender el país de amenazas internas y externas. En resoluciones del I Congreso del PCC se expresa “La educación estética está dirigida a desarrollar en los individuos la capacidad de expresar y percibir, comprender, sentir y disfrutar la belleza artística, los ideales y sentimientos que se manifiestan por medio del arte en sus diversas formas” (Tesis y Resoluciones, 1975, p. 363).
De ahí que constituya objetivo principal del presente artículo ofrecer algunos resultados de la investigación realizada para estudios de formación doctoral que permiten identificar las diferentes etapas, características, partiendo de un diagnóstico individual y grupal, que permita enriquecer el diagnóstico de la educadora de la primera infancia en esta materia, de vital importancia en el desarrollo de los educandos.
Materiales y métodos
Para establecer una base teórica sobre el concepto de “formación estética”, se utilizó el método de análisis documental, acudiendo a diversas fuentes de áreas como la Estética, la Filosofía y la Pedagogía. Además, fue necesaria la revisión de documentos normativos para escuelas pedagógicas, así como otros materiales impresos y digitales.
Los resultados de este análisis, junto a los marcos teóricos desarrollados, se compartieron y debatieron en talleres con expertos, docentes y estudiantes para llegar a un acuerdo sobre la definición del término y su estado actual, con el fin de demostrar la necesidad de la formación estético profesional en la especialidad educador de la primera infancia.
Resultados
Si bien la educación estética concibe como parte esencial los talleres de creación y apreciación de las diversas manifestaciones del arte, esta no debe limitarse sólo a este fin, ya que la estética como categoría vista desde la concepción materialista de la historia, abarca también la belleza de los actos humanos y la relación sensible del ser humano con la naturaleza, la sociedad y el pensamiento. Este requerimiento está estrechamente vinculado a la labor del Educador de la Primera Infancia, por lo que desde su formación debe garantizarse la aprehensión de estos valores.
La Estrategia de Trabajo para el Perfeccionamiento de la Educación Estética se concibió para contribuir a la formación de ciudadanos creativos, reflexivos y aptos en la asimilación e interpretación de los procesos sociales más generales. Por otro lado, busca que los ciudadanos logren insertarse en la dinámica de la sociedad y sus requerimientos de manera transformadora. Es por ello que en Cuba existen legislaciones que aseguran la formación estética a todos los ciudadanos, las cuales respaldan y promueven la educación artística y cultural en el país.
Estas directrices también conducen la formación del futuro profesional de la educación en escuelas pedagógicas teniendo en cuenta el perfil del egresado, que concibe el hábito por la lectura, la expresión del gusto estético en todas sus actividades, así como el respeto y amor por las manifestaciones genuinas del arte cubano y universal como parte de su cultura general integral. Sin embargo, aún existen carencias en los estudiantes de la especialidad Educador de la Primera Infancia que limitan su modo de actuación profesional.
La revisión de documentos normativos para escuelas pedagógicas permitió revelar la importancia que tiene la formación estética en los futuros profesionales de la educación. Entre los objetivos generales a cumplir por los egresados de estas instituciones se encuentran:
De la misma manera, pudieran citarse algunas de las habilidades profesionales fundamentales vinculadas a la estética como son:
La educación preescolar en ambas modalidades de atención, requiere de un profesional que sepa estar a la altura de los infantes; que con su ejemplo personal les ayude a vivir plenamente con alegría y fantasía. Para ello debe apoyarse en la música, el canto, la danza, los movimientos y la literatura infantil. Las imágenes y el sonido deben estar presentes en todo momento. El educador debe hacer descubrir a los niños un mundo lleno de posibilidades nuevas a través de colores, olores y sabores mediante un ambiente lúdico y desarrollador, que propicie el aprendizaje y la creatividad.
El estudio diagnóstico desarrollado a través de la observación a varias actividades docentes y extradocentes, además de encuestas y entrevistas a profesores y estudiantes, confirma que en la práctica pedagógica se manifiestan estas limitaciones:
Estas manifestaciones tanto en estudiantes como en profesores, limitan la aceptación e identificación de las cualidades del educador de la primera infancia, dificultando que logren un modo de actuación profesional acorde al perfil del egresado. De ahí la importancia de sensibilizar al claustro y estudiantes sobre la necesidad de la formación estética en esta especialidad.
Desde un punto de vista filosófico, la estética es la teoría de la belleza formal y de las sensaciones que ella despierta en el ser humano, de ahí su vínculo con el arte. Designa todo el sistema de relaciones emocionales, sensibles, figurativas y educativas que establece el hombre en nexos conscientes con la naturaleza, la sociedad, el arte y su propio ser.
Discusión
La estética concede al ser humano la capacidad de expresión individual. En los primeros años de vida, estas expresiones son generalmente guiadas por el adulto, por lo que tienden a ser imitaciones, reacciones aprendidas e incorporadas a la personalidad como son los gustos, disgustos, preferencias y cada cualidad viene acompañada de una sensación, un sentimiento que podemos evocar durante toda la vida.
De ahí la importancia de que nuestros educadores de la primera infancia sepan conducir este proceso de un mejor modo, en el cual, los niños puedan comenzar a distinguir lo feo de lo bello, lo valeroso de lo cobarde y lo justo de lo injusto, a la vez que puedan ser capaces de actuar coherentemente con nuestra sociedad y con el tipo de ser humano que se desea formar.
El principal objetivo de la formación estética para los estudiantes de escuelas pedagógicas es contribuir a lograr el máximo desarrollo de las potencialidades espirituales y culturales, a través del desarrollo de sus capacidades creadoras. Por ende, es un proceso educativo conscientemente organizado, dirigido y sistemático que se ejerce sobre la personalidad. La misma se desarrolla mediante la actividad y la comunicación establecida en la transmisión de los conocimientos y experiencias acumuladas por la humanidad.
Aunque ha sido abordada desde múltiples enfoques, la formación estético -profesional en muchas ocasiones se enmarca dentro de la educación artística, por lo que a menudo se concibe como estímulo al desarrollo de capacidades creadoras de la personalidad, capacidad de percepción estética, conciencia estética, hasta su maximización en el carácter de metafactor del proceso educativo. De esta forma, es difícil entender que la formación estético -profesional puede desarrollarse desde cualquier área del conocimiento, desde cualquier actividad y escenario, desde nosotros mismos como personas y por ende, en todo momento.
Las ideas anteriormente expuestas a partir del significado que tienen los resultados plasmados, demuestran el rol primordial del ser humano, el cual forma parte de un sistema multirrelacional de la estética hacia muchos sentidos y vías de tratamiento.
Estas consideraciones ayudan a entender el rol de la actividad en la formación estético - profesional, donde el estudiante debe asumir una actitud estética teniendo en cuenta sus necesidades, su concepción del mundo y las vivencias personales, en función del ideal estético según el contexto socio - histórico. Es fundamental que se reserve un espacio en la escuela para llevar a cabo la actividad estética, que abarque tanto las actividades curriculares como las extracurriculares, ya que ambas desempeñan un papel relevante en este ámbito.
Desde una mirada más específica, Peralta (2019); Presol (2020); Ventura (2021); Picaso (2022); Montano-Rodríguez (2023) y Dávila (2023) exponen valiosos planteamientos sobre la educación estética, los cuales constituyen la base para una mejor comprensión de la formación estético -profesional. Estos autores abordan elementos claves para la formación estética y ofrecen nuevas perspectivas, sin embargo, sus enfoques se limitan en gran medida al desarrollo del gusto estético y ahí es donde surgen las deficiencias, ya que evidencia la necesidad de explorar en profundidad las interconexiones que se establecen entre la Estética y los campos de la Filosofía, la Pedagogía y la Educación. Dichas interconexiones aún no se logran justificar adecuadamente, ya que las categorías estéticas no son totalmente argumentadas desde las perspectivas filosóficas y pedagógicas hacia la educación, lo que sugiere una brecha en la comprensión teórica que debe abordarse con el objetivo de proporcionar una base sólida para la formación estético -profesional.
Desde la perspectiva pedagógica se reconoce que existe una relación dialéctica entre la educación y la estética, ya que ambas tienen la función de formar al individuo en un área del conocimiento con impacto social en la vida y la regulación de sus relaciones en diferentes contextos. Estos objetivos son comunes para la formación estético -profesional.
Este tipo de formación tiene un sistema conceptual cuya principal característica es la coherencia con el momento histórico concreto y su meta es formar individuos sensibles, reflexivos y creadores. Para un educador de la primera infancia, esto se materializa en un profesional que guarda relación armónica en sus múltiples relaciones sociales, que además ame y defienda la condición humana. Pero para eso se necesita que desde el ámbito escolar se brinde una óptima orientación estético - interdisciplinar, ya que las relaciones dinámicas entre los diferentes componentes del proceso de enseñanza - aprendizaje contribuyen de manera significativa a la formación estético -profesional.
El perfil del egresado contempla un proceso formativo desde los planos cognitivo, afectivo - volitivo - motivacional y conductual del estudiante en el orden docente y extradocente. Se precisa entonces, de un proceso formativo con carácter integrador e interdisciplinario que revele los nexos y contradicciones de la realidad, así como la concatenación universal de los procesos y fenómenos. Estas ideas evidencian la necesidad de la aplicación de este principio de la educación desde una mirada martiana, lo que constituye otro fundamento pedagógico para este perfil.
La formación estético-profesional es un proceso educativo que se desarrolla en todos los contextos de la sociedad: familia, escuela y comunidad. Los medios de difusión masiva constituyen una herramienta muy útil en este sentido. Todo ello dirigido a la educación de la personalidad. Es a través de diferentes aspectos como son la formación y desarrollo de una conciencia estética, los sentimientos, valores, actitudes y gustos estéticos, que se contribuye al logro de una cultura estética en correspondencia con las demandas sociales de un momento histórico concreto y con su objeto social como profesional de la educación.
Se debe estudiar desde una posición integradora e interdisciplinaria, hacia un proceso de enseñanza-aprendizaje desde todas las áreas del conocimiento, así como la integración de las influencias educativas familiares, escolares y comunitarias. De ahí que la interdisciplinariedad se conciba como un proceso que media en la resolución de problemas profesionales complejos, teniendo como punto de partida la personalidad del individuo y sus formas de expresión.
Conclusiones
La formación estético - profesional del educador de la primera infancia es fundamental para la transformación de su desempeño laboral, ya que permite expresar habilidades estéticas y culturales acordes al profesional que exige nuestra sociedad actual, a la vez que estimula a los niños de la primera infancia hacia el gusto estético y defensa de nuestra identidad mediante su ejemplo personal.
La realización de esta investigación permitió asegurar que el tratamiento estético desde la grada curricular aún es insuficiente y que es necesario concebir la formación estética de este profesional a través de un enfoque interdisciplinar hacia la estética y todo lo que esta conlleva.
Por su parte, las insuficiencias teóricas y prácticas conducen a la necesidad de sistematizar los presupuestos teóricos y metodológicos que sustentan la formación estético-profesional con carácter interdisciplinar contextualizado a escuelas pedagógicas, con énfasis en la especialidad Educador de la Primera Infancia, por ser el profesional que inicia la formación de las futuras generaciones.
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Conflicto de intereses
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
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Katia Vaillant Serrano llevó a cabo el proceso de investigación
Ariolki Fumero Pérez revisión de la estructura
Irelis de la Caridad Escalona Vázquez. Estilo y Redacción